Llega la final del Benidorm Fest: el festival que queríamos, un sueño hecho realidad para los que nos consideramos eurofáns (palabra, por cierto, ya aceptada con todos los honores por la RAE). Y llega el momento de elegir nuestra candidatura favorita para ganar y, por tanto, representar a España en Eurovisión 2022 (que se celebrará en Turín el próximo mes de mayo). En mi caso, no ha sido fácil decantarme solo por una. De hecho, tengo tres opciones ganadoras que, pienso, podrían hacer un gran papel en Eurovisión. Pero mañana por la noche mi voto solo puede ser para una. Por ello, quiero compartir con vosotros este debate interno que he vivido los últimos días, y argumentar mi top3 de la gran final del Benidorm Fest (aprovechando la ocasión también para hacer campaña por las tres y, especialmente, por mi favorita):
3. Rigoberta Bandini (Ay mamá) nos trae un himno con un mensaje tan importante como bello. Reconozco que me emocioné muchísimo la primera vez que la escuché, sobre todo, con los primeros versos de su letra. Es un tema que te hace llorar y bailar al mismo tiempo. ¿Cómo puede conseguirlo? Pura magia. La magia de las madres, sin duda. Aun así, ésta no ha sido la opción que más me ha llamado la atención sobre el escenario y el producto completo que ofrece no me ha impactado tanto como sí lo han hecho mis otras dos favoritas.
2. Chanel (SloMo) ha sido, en mi opinión, la gran sorpresa de esta primera edición del festival. Cuando el pasado martes por la noche lo dio todo sobre el escenario, miles de pelucas salieron volando (y, a día de hoy, todavía no han vuelto). Yo sigo anonadado reproduciendo en bucle su actuación. ¡Qué poderío! ¡Qué Diosa! Por un momento, llegué a subirla a mi top1, y a subirme yo a su barquito. Confieso que mis ganas de “perreo” después de estos tiempos que estamos viviendo de tanta negatividad (o positividad, según lo miremos) me empujaban a votar por ella; porque necesitamos fuerza, energía y alegría más que nunca.
1. No obstante, me voy a dejar llevar por el corazón. Y voy a mantenerme fiel a mi primera impresión, a mi primera emoción al conocer todos los temas y a las que han sido mis favoritas desde el primer momento. Yo apuesto por “Terra” de Tanxugueiras. Como sabéis, soy hablante y defensor del aragonés: una lengua minoritaria en peligro de desaparecer si no hacemos algo entre todos (porque es patrimonio de todos) para protegerla. Los hablantes de lenguas minoritarias y lenguas cooficiales hemos de apoyarnos; mi voto a “Terra” (un tema en galego) es un voto para esta lucha. Además, me cautivó la energía de sus intérpretes, la originalidad del tema, su frescura y su capacidad para adaptar a la actualidad la música más tradicional. Por otra parte, algunos dirán que solo representa a Galicia; yo discrepo. Representa la diversidad lingüística y cultural de España (le pese a quien le pese). Otros dirán que nadie las va a entender en Europa; y, de nuevo, discrepo. La música es un idioma internacional que nos emociona sin necesidad de comprender cada palabra de su letra (también existen los traductores). En la música, al fin y al cabo, “no hay fronteras”, “non hai fronteiras”, “ez dago mugarik”, “no hi ha fronteres”, “nun hai fronteres”, “no bi ha mugas” (esta última la añado yo, en aragonés).
Dicho lo cual, gane quien gane, disfrutemos de este evento que tanto tiempo llevamos pidiendo los amantes de Eurovisión. Gracias a RTVE por este gran paso (¡por fin, vaya cambio!) y por la calidad que está demostrando tener este formato. Ojalá así cada año se sumen más personas a vivir con pasión este festival; porque Eurovisión nació para unir culturas, países y personas. Dejemos a un lado los enfrentamientos gratuitos, las malas palabras y los desprecios. Y, sea cual sea nuestra favorita, seamos ejemplo de libertad, respeto y amor por la música.
¡Viva Eurovisión y larga vida al Benidorm Fest!
(PD: Ojalá en próximas ediciones pueda estar yo ahí. Desde luego, ya os puedo adelantar que voy a trabajar duro para presentar una gran propuesta y conseguirlo).
*Aquí os dejo mi top completo para la gran final:
